Dos goles de Suárez y Messi en los minutos 86 y 88 han salvado un punto de oro en la lucha por el título de Liga. El Sevilla, que se había adelantado con goles de Franco Vázquez y Luis Muriel en los minutos 36 y 50, se ha visto sorprendido por la ofensiva azulgrana en los últimos instantes de partido. La entrada de en el minuto 58 ha transformado el ataque del conjunto de Valverde, que ha acabado encontrando el premio del empate tras una reacción digna del líder de la competición.
Al final han aparecido los cracks. Una diana acrobática de Suárez a la salida de un córner y un disparo de Messi desde la frontal han empatado un partido muy complicado en el Sánchez-Pizjuán, y el Barça ya suma 37 partidos sin conocer la derrota en la Liga. Las dianas de Franco Vázquez y Luis Muriel en los minutos 36 y 50 habían adelantado al conjunto de Nervión, pero la reacción barcelonista en el tramo final de partido ha salvado un punto para el conjunto de Valverde.
La entrada de Messi en el minuto 58 ha transformado al Barça. El equipo ha comenzado a crear mucho más peligro tras la entrada del astro argentino, con dos remates a los palos de Suárez (min 59) y de Rakitic justo antes del primer gol azulgrana. Durante el partido, sin embargo, la historia ha sido diferente, ya que el Sevilla ha creado mucho peligro cuando gozaba de campo para correr. Correa ha tenido una ocasión para inaugurar el marcador en el minuto 21, pero su cabezazo ha salido desviado. Y, en el minuto 36, los de Montella se han adelantado con un gol de Franco Vázquez, que ha rematado un buen pase del extremo argentino del Sevilla.
En el minuto 50, Muriel ha rematado a gol un rechace de Ter Stegen, que había despejado un disparo de Escudero previamente. El equipo de Montella ha aturdido a la defensa azulgrana y ha podido anotar algún gol más, pero no han tenido acierto en la definición. La entrada de Messi ha cambiado la situación de partido, y el Barça se ha lanzado a buscar la remontada, que al final ha llegado en forma de un punto vital de cara al título de Liga, y de paso, para mantener la racha de 37 partidos sin perder en competición doméstica.